POR.:
ALEJANDRO SANTANA
Para
ponernos al dÃa con cualquier impuesto, y obligaciones cotidianas, solemos
actuar con irresponsabilidad, aunque esas irresponsabilidades nos generen más
gastos del previsto.
Cuando
dejamos pasar la fecha del pago de algo que tenemos pendiente, eso nos trae la
necesidad de tener que invertir más dinero. El caso de los marbetes, cada año.
El asumir
compromisos con una prestancia fuera de lo normal, pero llegado el tiempo se
nos olvida, eso, es fatal porque nos
identifica como irresponsables que no sabemos cumplir con lo acordado.
Cuando
estamos al frente de algo, que requiere de responsabilidad, no nos importa el
ser el primer incumplidor, me explico, cuando invitas a una reunión a una hora especÃfica
y los invitados llegan todos, a tiempo, menos tú. Eso es irresponsabilidad en cualquier parte
del planeta.
Cuando estás en una reunión donde se están tratando
temas de mucha importancia, pero tú estás pendiente a tu celular, es una
irresponsabilidad irritante, y que decir cuando interrumpes a quien tiene la
palabra, para referir un tema que está muy alejado de lo que se está tratando.
Pero hay más,
nunca escucharás a un egresado de Harvard, o de cualquier Universidad famosa, hablar
de eso, o destacar que es brillante… Los mejores profesionales dejan que sus
hechos hablen poro ellos, no suelen ser presumidos, arrogantes, pero mucho
menos atribuirse glorias…
Como reflexión,
dejo saber que Dios tiene más grandeza que todos nosotros, Pero es el más
humilde y sus actuaciones están enmarcadas dentro de las responsabilidades,
transparencias y amor hacia los demás… Y como consejo sano, no presumas de tus tÃtulos,
porque todos en esta vida tenemos un tÃtulo,. El que nos acredita, como barrenderos, chiriperos, jornaleros, aunque el tÃtulo más significativo es el que nos acredita como cumplidores de unos 10
mandamientos que deben normal nuestras actuaciones en la vida, frente a los demás
seres humanos… Dios los bendiga y les dé
la necesaria sabidurÃa para que no me odien por destacar parte de nuestras
malas actuaciones. Incluyendo las mÃas

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